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Keiko Koma escribiendo para “Concierto Persépolis IDAKI SHIN”
El presidente de Irán pronunció un discurso diciendo que cambios en nuestra vida interna y mental eran la única manera de efectuar cambios en el ambiente externo. Esta es la razón de haber escenificado el concierto Manifiesto Cósmico en Etiopía en 2001. El problema de pobreza y sequía demanda cambios en toda la sociedad. Como cada individuo constituye la sociedad, cada cual ha de dejar de repetir el patrón de vida heredado del pasado. La paz no viene del pasado. Es algo para realizar en el futuro desconocido. Así que quienes deseen realizar la paz saben cuán importante es liberarse de cargas mentales formuladas en el pasado. De modo que organizamos el concierto Idaki Shin sabiendo que su música proporciona al público la única oportunidad para experimentar y reconocer la unidad del hombre con el universo; creemos que este es un atajo hacia la paz. El embajador de Etiopía en Japón en esa época entregó mundialmente su mensaje confirmando lo que había experimentado al participar en uno de los conciertos de Idaki Shin en Tokio. En el año 2003 se nos dio una preciosa oportunidad de organizar un concierto Tea de Paz en Dar es Salaam, Tanzanía, como programa oficial de la conferencia SADC. Idaki Shin dio la nueva definición de la paz mediante su música como el primer grito de un neonato. Fue un momento de despertar para el mundo y el universo. El concierto Tea de Paz realizó mundialmente esta energía para la paz que reside en cada humano. Un concierto para la paz organizado a gran escala nos permite sentir que el ambiente mundial está cambiando hacia una nueva era donde hay cada vez menos espacio para que las cosas malas se escondan. Nuestro próximo concierto tuvo lugar en Japón en uno de los lugares históricos más antiguos, Sannaimaruyama; allí la espiritualidad original de los japoneses, Jomon, fue expresada. Fue la energía espiritual que había prevalecido mundialmente en la antigüedad, y que aun vivía. Confiaba en que debido a la manifestación del poder espiritual de Jomon milagrosamente se nos concedió permiso para montar un concierto en Persépolis. Allí no se permitía ningún evento, y todos nos dijeron que era tan difícil como hacer otra revolución. Siendo el lugar santo más precioso de la historia de Irán, y un sitio del patrimonio cultural mundial, había muchos opuestos a que meros turistas entraran en Persépolis. Pero poco después del concierto Jomon la situación cambió drásticamente a favor de nuestro concierto, que terminó realizándose con mucho éxito. Además se me permitió pronunciar un discurso al final del concierto, lo cual también era inusual en Irán. Todo el público estuvo muy contento y dijo que era un acontecimiento simbólico, conmemorando la llegada de una nieva era.
Persépolis fue cuna de un dios antiguo. Antes de la manifestación de su poder y verdad originales, por medio de este concierto, el mal quedó resuelto en nada y prevaleció la justicia. Llegué a comprender cómo Darío Magno vivía en comunión con dios. Este estado de unidad con la naturaleza divina es el estado autónomo de la humanidad. Cuando cada pueblo comienza a vivir fiel a sí mismo y su naturaleza, ejerciendo su único talento al máximo, el mundo se vuelve diferente y realmente pacífico. La manifestación de esta divinidad alzó ante nuestros ojos todas las cosas malas ocultas. Así que vamos a presenciar más y más tragedia como última resistencia del poder maligno. Empero, sabemos que el poder del amor crece y se difunde más rápidamente que nunca.
Recuerdo claramente el momento cuando me di cuenta de que los humanos toman medidas drásticas por el amor cuando se comprende profundamente la naturaleza verdadera de la tristeza. Estaba en el medio del monte Gojo, el lugar del nacimiento de Koguryo. La verdad no ha de ser observada sino expresada y compartida. Así cada nota tocada por Idaki Shin es sonido que expresa la verdad. Su cuerpo está conectado con cada criatura. Su música es sonido generado desde el estado de unidad del hombre con el vasto universo. Porque cada forma de vida avanza hacia el futuro, cada nota de su música es otro paso más hacia el amanecer de la nueva historia de la humanidad. La energía de la vida es expresada, aquí y ahora, por medio de su estilo de improvisación. Está libre de las cargas de factura humana del pasado. Así que el concierto de Persépolis conmemoró maravillosamente la vertiente en la historia de la humanidad; de la historia de miseria y destrucción a la de paz y coexistencia con todas las criaturas del planeta. Muchos aun son controlados por la influencia del dinero y el mundo material, pero preveo que pronto o tarde cualquier humano se dará cuenta de su naturaleza como vida nacida de la tierra y vivirá para la creación de una sociedad pacífica, e intentará preservar los recursos del mundo para las generaciones venideras. Para este fin insisto que la música de Idaki Shin es el atajo para que la gente reconozca y recupere su verdadera naturaleza humana.
Para crear una sociedad pacífica cada cual expresará lo que realmente desea hacer y llegará a saber quién es. Quienes reconozcan la necesidad de hacer algo para esto podrán juntarse más fácilmente que nunca. El concierto de Persépolis fue realizado mediante donativos de sendos individuos. Ya fue una forma de cooperación entre gente ordinaria. Me sentí enormemente en deuda con el buen corazón de esta gente. Nuestro próximo proyecto es montar en el sur del Líbano el programa titulado Leyendas de Koguryo Redescubiertas. Sinceramente deseo que sigamos compartiendo con Vds. este precioso momento de historia que acoge la nueva era de la humanidad bendita de paz y felicidad.
Keiko Koma
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